Los hijos de Fleetwood Mac
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Desde el Say You Will (2003), el último álbum en estudio de
la banda, Lindsey Buckingham no ha estado mano sobre mano: ha publicado
tres buenísimos LPs, el último de ellos hace escasos meses. Seeds We Sow
(2011) es una pequeña delicia, un trabajo muy personal, grabado,
producido y arreglado por él mismo en el estudio de su casa.
Diez temas propios más una versión de She Smiled Sweetly de Rolling Stones que me recuerdan en algunas ocasiones al Tusk
(1979), uno de los mejores y más experimentales trabajos de Fleetwood
Mac. Pero en estas "semillas que plantamos" todo tiene un estilo propio:
la voz ahogada de Buckingham, sus arpegios hipnóticos, sus melodías
inclasificables, los aires oníricos de When She Comes Down, los frenéticos de That's The Way The Love Goes o la combinación de ambos de Rock Away Blind.
No sé si Seeds We Sow es un disco apto para todos los oídos, o sólo para los de los que alguna vez fuimos fans de Fleetwood Mac (aquí abajo está el apartado Comentarios, por si queréis dar vuestra opinión). Lo que sí sé es que, entre tanto neo-soul y tanta americana, ha significado para mí un soplo de aire fresco de una originalidad y una calidad indiscutibles.
3 comentarios:
Pues si, te doy la razón, entre tanto de lo mismo Lindsey a facturado un disco fuera de tiempo, anclado en los ochenta pero con canciones como soles. Uno de mis preferidos.
Saludos
es curioso, a pesar de que me encantan los Mac, nunca he seguido sus "affairs" en solitario, nunca es tarde para intentarlo
espero impaciente tu texto sobre qué supuso la banda para ti. Asi contrastaré lo que fueron para mi. Los Mac han sido grandes, muy grandes
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