miércoles, 19 de octubre de 2016

El indie

Ando leyendo estos días El mundo de la tarántula, las memorias de Pablo Carbonell, líder de Los Toreros Muertos, además de cómico, actor, director de cine, entrevistador, dibujante, pintor y, por lo que parece (si no hay negros de por medio), buen escritor. El libro es fantástico, y lo estoy disfrutando de lo lindo.

Entre anécdotas y retazos de su vida, el gaditano inserta reflexiones sobre temas de lo más variado, algunas en serio, otras en coña. Una de las que me ha llamado la atención es ésta sobre la música indie:

Hoy he estado escuchando un grupo de indie en uno de esos conciertos que programa Radio 3. Me he quedado reflexionando sobre el efecto de esa música en nuestra juventud de 2014 y me ha parecido percibir que hay una intención sedante y calmante, un mensaje claro de apatía y frustración para disfrazar de enrollada la actitud de sodomita pasivo que ha adoptado gran parte de la juventud. Me atrevería a decir que es música cocinada en los sótanos de la central de inteligencia para aplacar cualquier tipo de rebeldía o ganas de montar jaleo. Las maracas de Machín quitaban el hambre en la posguerra. La música indie crea una camisa de fuerza sonora para apaciguar posibles rebeliones juveniles.

Genial.