sábado, 23 de abril de 2016

Felicidades por tanto

De la decena de blogs que sigo, el único de temática humorística es Más claro, agua, del escritor de Miranda de Ebro pero afincado en Sevilla Eduardo Cruz Acillona. Hace unos meses, el susodicho autoeditó Felicidades por tanto (2015), un curioso libro donde, por cada día del año, hace una reflexión cargada de ironía (y a menudo de mala leche) sobre alguna o algunas de las efemérides de la fecha en cuestión. Por ejemplo (y veréis que he seleccionado algunas relacionadas con la música):

14 de enero
Tal día como hoy nacieron Georgie Dann y El Puma, dos de los artistas que más hicieron por el botón Mute del mando a distancia de la tele.

20 de febrero
Hoy es el Día Internacional del Gato. Y el cumpleaños de Kurt Cobain. Entre ambos suman seis vidas.

29 de marzo
Hoy en San Francisco (California) se celebra el Día de Britney Spears. Felicidades, por tanto, a todos los que no vivís en San Francisco.

21 de abril
Tal día como hoy nacieron Isabel II e Iggy Pop, valga la redundancia...

26 de noviembre
Tal día como hoy de 1991 Ricky Martin y Michael Jackson lanzan al mercado sus discos homónimos: “Ricky Martin” y “Dangerous”


Por 12 euros, lo que te cuesta en un bar de hipsters un vaso de tónica con tres gotas de ginebra y cuatro arándanos flotando al tuntún, puedes hacerte con una copia. Yo lo hice, y su lectura me arrancó muchas sonrisas y alguna que otra carcajada. Así que si os animáis, visitad su blog y, tras pasar por caja, el autor os enviará por correo un ejemplar dedicado. Y ya me contaréis...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Y no sólo fueron esos los nacidos el 21 de abril...En ese libro hay uno que figura ese día correspondiente en la hoja firmada por su autor. Eso es lo bueno del libro clásico y del acuerdo entre ambos; y mucho nos reímos por ello.
Perdura la hoja en el libro sin que llegue el otoño a las librerías y todo el año se pueda contemplar cómo y porqué.
Tal vez un día especial, y ambos lo saben cuando hablan de ello y se toman unas cervezas
Autor y uno de sus productores así lo decidieron
Finalmente el autor decidió cuál sería el nombre que debía figurar sufragando ese día; y se decidió por el clásico, el irónico y que siempre fue más cínico con su origen.