viernes, 21 de enero de 2011

Treme, Nueva Orleans y el levantarse una vez más

Es Treme una serie diferente, de aquellas que no impactan a primera vista, como los discos realmente buenos, aquellos que necesitan de múltiples degustaciones a consciencia para apreciar toda su riqueza. Pero que luego recompensan con su profundidad, con su tempo especial, con sus detalles, con su originalidad, a los que han hecho el "esfuerzo" de tener paciencia y no buscar la satisfacción inmediata.


Escribo sobre ella precipitadamente, porque tan sólo he visto los dos primeros capítulos, pero creo que disfrutaré de los 8 restantes que conforman la primera temporada, y creo que no me reprochareis que os la recomiende.

La serie forma parte a mi entender de esa hornada de producciones que, de un tiempo a esta parte, se crean con esa calidad que te impide distinguir cada capítulo de una buena película, especialmente en lo tocante a los guiones, a la fotografía, los diálogos y el ambiente.

Y Treme es además especial porque narra el día a día de un conjunto de personas, la mayoría músicos pero no todos, tratando de reconstruir su vida en un Nueva Orleans recientemente arrasado por el Katrina. Por supuesto, la música es una banda sonora constante en toda la vida de NOLA, algo que me hace envidiarlos sobremanera (es el único aspecto que les envidio, porque su situación no es para tirar cohetes precisamente). Pero te das cuenta de como nacen, viven y mueren (en los entierros musicales en que la banda acompaña el féretro desde casa al cementerio, tocando) rodeados de música. La música es cultura en estado puro que permea en sus almas de una manera que pocos pueblos respiran, pero es también trabajo, consuelo, culpa y redención. La música ES Nueva Orleans.


Por si fuera poco, los capítulos están trufados de apariciones de músicos reales, que hacen de ellos mismos, como Elvis Costello, Allen Toussaint, Kermit Ruffins (que descubrimos gracias a nuestro añorado Manolo), Trombone Shorty (que tiene un disco más que interesante que saqué de los Editor's Picks de Allmusic), y muchísimos otros.

Después de verla, he vuelto a buscar y administrarme con una sonrisa en los labios esta maravilla de los también autóctonos Dirty Dozen Brass Band, el Funeral for a Friend, que comentábamos hace tiempo.


Pocas series tienen tanta música en su ADN, música de la buena. Espero que la disfruteis tanto como yo.

Nos vemos las calvas.

5 comentarios:

TwoHeads dijo...

A mi me a gustado mucho la serie y lo que espero es que haya una segunda temporada. Y por supuesto la banda sonora es bestial....
Un saludo.

Olvido A. dijo...

Querido, estás ante un nuevo clásico. Después, búscate los podcast que hicieron en la cadena SER. Un abrazo y un guiño cómplice

Olvido A. dijo...

David, aquí tienes los programas/podcast que te comentaba:

http://lacomunidad.cadenaser.com/treme/posts

¡A gozarlos! :)

David dijo...

Olvido, muchas gracias!

Que buen puñado de información de calidad. La degustaré con calma, poca luz y buena música.

Anónimo dijo...

Gran serie si senior, la segunda temporada empezaron a rodarla en noviembre y siguen haciendolo (una amiga mia rodo como extra la semana pasada, le pagaron 100 pavos por 8 horas)... aqui en Nola esta creando toda una revolucion/devocion....la cara b es que da a conocer demasiados bares en los que no hacian falta turistas