El regreso de la joven promesa
A principios de este 2010 se publicó What You're Getting Into, el nuevo trabajo de la otrora precoz blues-girl Shannon Curfman. Ya comenté hace unos años que a la señorita Curfman no le iban a dar precisamente la medalla al trabajo. Entre su fantástico primer álbum de debut, Loud Guitars, Big Suspicions (1999) y este último, la pelirroja sólo había publicado un LP, Fast Lane Addiction (2007), que para mi gusto tenía un sonido demasiado ochentero que me recordaba horrores a Vixen. Pero con este What You're... Shannon recupera el feeling que la llevó a convertirse en una jovencísima promesa del modern electric blues con tan solo 13 añitos.
El disco comienza con el tema que le da título, y es toda una declaración de intenciones: base rítmica contundente, guitarras incendiarias, buenos solos, y una voz madura y beligerante. Este estilo, blues electrizante con influencias del rock duro, impregna todo el álbum, aunque hay temas que beben del funk (Free Your Mind), del rock sureño (Heaven Is In Your Mind, Curious...) e incluso del soul (All I Have). Eso sí, en el disco no tienen cabida baladas ni ñoñerías, aunque sí tres buenas versiones: The Core de Eric Clapton, interpretada a dúo con Joe Bonamassa; la mítica Oh Well de Fleetwood Mac, potentísima, aunque demasiado parecida a la revisión que hizo Kenny Way Shepherd en su Live On (1999); y la curiosa Dragon Attack, del The Game (1980) de Queen.
En definitiva, What You're Getting Into no inventa la sopa de ajo, pero es un LP que no tiene desperdicio, y un dignísimo regreso de Shannon Curfman a la palestra del modern electric blues. Y en estos tiempos, en que otras jóvenes promesas como Jonny Lang o el mencionado Kenny Wayne Shepherd han abandonado el género para dedicarse a sonidos más modernos, hay que agradecer a la chica que se mantenga fiel a sus raíces. Y además, haciéndolo bien.
No hay comentarios:
Publicar un comentario