martes, 14 de mayo de 2019

La encrucijada del diablo


Netflix estrenó hace unos días La encrucijada del diablo (2019), un documental sobre el mítico guitarrista de blues Robert Johnson. La película no es demasiado seria, ya que se empeña en hacernos creer en (o al menos, en sembrar dudas sobre) la leyenda de que Johnson vendió su alma al diablo a cambio de convertirse en un virtuoso de la guitarra: una historia inventada por motivos comerciales varias décadas después de la muerte del bluesman, y de hecho usurpada a otro Johnson, Tommy Johnson, que sí afirmaba (en broma, claro) que el diablo había sido quien le había enseñado a tocar.

Así que lo más interesante del pseudodocumental son los testimonios de muchos grandes del género, que hablan sobre la técnica de Robert Johnson, y su importancia en la historia del blues en particular y de la música en general, entre los que se encuentran Keith Richards, Eric Clapton, Taj Mahal, Keb' Mo', Rory Block y Bonnie Raitt.

Pero lo más sorprendente, a la vez que grato, es constatar que la figura de Johnson y su legado siguen vigentes y despertando interés más de 80 años después de su fallecimiento, a la temprana edad de 27 años, y con sólo 29 canciones en su discografía. Aunque vaya canciones, claro: ni más ni menos que la semilla de todo el blues posterior y, por supuesto, del rock.





1 comentario:

Jesus Silva dijo...

Al diablo le conviene que no se sepa la verdad pero, como dice el dicho "cuando el río suena, piedras lleva", y no es el único caso, como lo expone el documental acerca del club de los 27. El caso más asombroso lo es el de los Beatles, más exactamente con John Lennon.
Sólo estudiando la Biblia nos damos cuenta de lo que sucede en el mundo espiritual y que la humanidad yace bajo la influencia de Satanás.