Hurgando en la basura
Alentado por las buenas críticas que he ido viendo en los blogs (como la de The last DJ's refugee), hace unos días me hice con Los trapos sucios, la autobiografía de Mötley Crüe.
Como no podía ser de otra manera, y supongo que esto no dice gran cosa
de mí, lo estoy pasando en grande con las barbaridades y depravaciones
de la banda californiana. Hete aquí un ejemplo, narrado por Nikki Sixx:
Saqué la hoja, extendí el brazo en el que llevaba un brazalete y hundí la navaja directamente sobre mi codo, deslizándola hacia abajo unos diez centímetros y cortando en algunos sitios tan profundamente que se podía ver el hueso (...). A continuación llamé a la policía y dije que mi madre me había agredido.
Y aquí otro momento álgido, a cargo de Tommy Lee hablando de su primera novia:
De repente ella rugió como un puma enloquecido y su coño explotó en mi boca. El agua salía a chorros. Se estaba corriendo como un depósito agujereado; era lo más alucinante que había visto en mi vida. En aquel momento pensé: "Oh, Dios mío, estoy enamorado de esta chica. ¡Ésta es la mujer de mi vida!
Semejantes lindezas se suceden página sí página también, dejando al descubierto las historias más excesivas del grupo, que se agarraron al sex, drugs and rock'n'roll como si no hubiera un mañana. Y cuesta creer que lo hubo, y que ninguno de ellos terminara en un depósito de cadáveres con una jeringuilla colgando del brazo.
Todavía voy por la página 100, pero si el libro mantiene el nivel, tengo diversión asegurada durante casi 400 páginas más. Como bien dice Nick Hornby en la contraportada, "si hay historias peores que ésta en el rock and roll, no merece la pena contarlas".
Saqué la hoja, extendí el brazo en el que llevaba un brazalete y hundí la navaja directamente sobre mi codo, deslizándola hacia abajo unos diez centímetros y cortando en algunos sitios tan profundamente que se podía ver el hueso (...). A continuación llamé a la policía y dije que mi madre me había agredido.
Y aquí otro momento álgido, a cargo de Tommy Lee hablando de su primera novia:
De repente ella rugió como un puma enloquecido y su coño explotó en mi boca. El agua salía a chorros. Se estaba corriendo como un depósito agujereado; era lo más alucinante que había visto en mi vida. En aquel momento pensé: "Oh, Dios mío, estoy enamorado de esta chica. ¡Ésta es la mujer de mi vida!
Semejantes lindezas se suceden página sí página también, dejando al descubierto las historias más excesivas del grupo, que se agarraron al sex, drugs and rock'n'roll como si no hubiera un mañana. Y cuesta creer que lo hubo, y que ninguno de ellos terminara en un depósito de cadáveres con una jeringuilla colgando del brazo.
Todavía voy por la página 100, pero si el libro mantiene el nivel, tengo diversión asegurada durante casi 400 páginas más. Como bien dice Nick Hornby en la contraportada, "si hay historias peores que ésta en el rock and roll, no merece la pena contarlas".
4 comentarios:
A mí me pareció el mejor libro que lei en mi vida!
Por el final, como puedes imaginar, no están tan desfasaos, pero mola igual...
Soy muy aficionado a leer libros sobre rock, biografías de artistas y demás. He leído un huevo de ellas y no hay ninguna que ni siquiera se aproxime a ésta. Impresionante. Lo leí en menos de una semana. Casi no hice otra cosa hasta que lo terminé. El mejor sin duda alguna. El mejor regalo que se le puede hacer a un amigo.
Ayer lo terminé. ¡Fantástico!
Publicar un comentario